lunes, 2 de noviembre de 2009

Concurso Las Recetas de la Abuela: 1º, 2º y 3º Puesto!

Como ya todos sabrán, el pasado jueves 29 de Octubre Celia hizo entrega de los premios para los ganadores del Concurso Las Recetas de la Abuela. El acontecimiento fue todo un éxito, y la alegría de los participantes colmó el pabellón argentina de Ciudad Universitaria. Por esta razón queremos compartir con todos nuestros seguidores las recetas de los tres primeros puestos. Como así también felicitar una vez más a todos aquellos que se sumaron a este sueño.

Aquí van las recetas con sus procedimientos y su historia…que lo disfruten!!!


Receta: “Panini Neri” - Muchas gracias a Silvia Lamberte - Puesto Nº 1
La estridente sirena del barco se elevaba en aquellos lejanos puertos, entremezclándose entre el ondear de pañuelos y rostros llorosos, que despedían a sus seres queridos. La esperanza de un futuro promisorio hacía mas leve el adiós de los que arracimados en la gran planchada del barco, se apresuraban a partir...

Así llegaron a la desolada pampa Argentina, y en este crisol de razas, fueron intercambiándose los sabores, las costumbres y las recetas transmitidas en su habitual dialecto; cruzaron los campos, las fondas y se instalaron en las precarias cocinas, con fogones en las más humildes o en las más sofisticadas, la “cocina económica de guisa”...

Los “Panini neri” –pancitos negros-, receta traída por mis nonos de su lejano Piemonte, ocuparon un espacio especial y perdurable en el tiempo...eran dulzuras fabricadas únicamente cuando se hacía el pan casero, suceso que ocurría dos veces al mes, a no ser que una ocasión especial modificara la fecha. ¡Y eso era toda una fiesta! Debo aclarar que esta receta es para diez o doce comensales; la nonna triplicaba las medidas de acuerdo a nuestra gran familia.

A las ocho de la mañana y después de esta larga reunión de artes culinarios, partíamos todos para el colegio; las nenas en sulki, los varones a caballo. Ese día parecía no acabar… la impaciencia nos consumía. Sabíamos que al llegar, habría un banquete...

Y así era. La mesa dispuesta en la gran galería nos separaba, hogazas de pan aún tibio estaban sobre la mesa en grandes fuentes; rodajas de queso, tomates, manteca, miel, salames hervidos, etc., completaban el menú. ¡Qué aromas imborrables!

Y luego del premiado postre, los “panini neri” que recibían el nombre de “negros” porque antes de llevarlos al horno, eran espolvoreados con abundante azúcar negra: la cocción les daba esa tonalidad y el agradable sabor a azúcar quemada...

Con el correr de los años, mi madre fue pesando esos puñados y poquititos para que la receta del Panini siguiera resultando tal cual era, en las manos de futuras generaciones y así, la transmito hoy:


Ingredientes:
1 kg. de harina común;
½ cdta. de sal;
150 gr. de azúcar;
80 gr. de levadura de cerveza;
200 cc. de agua tibia;

Ralladura de 1 limón;
1 huevo;
150 gr. de manteca;

100 gr. de pasas de uva;
Cascarita de naranja, cortada fina;
100 gr. de nueces picadas;
Azúcar negra para espolvorear.

Procedimiento:

Verter la levadura en el agua tibia, dejar que la misma se acondicione al medio, así actúa mejor.
Sobre la mesada de trabajo hacer una corona con la harina y la sal.
Aparte debo mezclar la manteca (debe estar blanda como el betún) con el azúcar, agregar la ralladura de limón y el huevo.
Ahora dentro del aro de harina, vierto la levadura y la mezcla de manteca.
Amasar bien, hasta unir todos los ingredientes y dejar una masa homogénea. De ser necesario, agregar un poco más de harina. Por último incorporo las pasas, las cascaritas de naranja y las nueces pasadas todas previamente por harina.
Formar bollitos pequeños. Dejar leudar y, antes de llevarlos al horno, espolvorear con azúcar negra. El horno debe estar a temperatura moderada; el tiempo de cocción varía según el tamaño de los panini.


Receta “Ginger Bread” Muchas gracias a Luis Guillermo Bandieri - Puesto 2 -
Esta historia nace en la década del ‘50, cuando mi madre conoce a una dama española de nombre Mary, clienta de su negocio y que vivía en Río II, provincia de Córdoba.Ya radicada en nuestro país, se contacta con un caballero austríaco llegado a la Argentina después de la Segunda Guerra Mundial, con el cual se casa decidiendo el matrimonio vivir en Río II.

Esta fina dama nació en España, y siendo muy pequeña se trasladó con sus padres a Inglaterra dónde pasó su niñez. Termina sus estudios secundarios y esta culta adolescente comienza a trabajar en Londres en la casa de una duquesa como institutriz de sus hijas. En su diaria labor le ayudaba a las hijas de la duquesa en sus tareas escolares, enseñándoles también buenos modales, protocolo y todo lo necesario para desempeñarse en el mundo de la aristocracia.Así mismo, entre sus actividades de institutriz y el tiempo libre preparaba budines y masas que la duquesa y sus amigas degustaban con el té de las cinco de la tarde.

La amistad entre mi madre y la dama española se afianzó de tal manera que en varias oportunidades fuimos a visitar a Miss Mary - tal como la llamaban sus vecinos – en su casa de Río II, pudiendo allí saborear algunas de sus exquisiteces, entre ellas los scons y el pan de jengibre que acompañábamos con un delicioso té que alguna amiga le traía de vez en cuando de su añorada Inglaterra.

Antes de morir, Miss Mary le regaló a mi madre un viejo cuaderno de páginas amarillentas y tapa de hule negro, en el que se encontraban variadas recetas de cocina – la mayoría de ellas escritas en inglés – de donde seleccioné esta deliciosa receta de “Ginger Bread”.


Ingredientes:
200 gramos de manteca
500 gramos de harina leudante
200 gramos de azúcar blanca molida
4 yemas
4 claras
½ taza de leche
2 cucharadas de cognac
1 cucharadita de esencia de vainilla

2 tazas de higos tiernizados (o pasas de higo)
1 cucharadita de jengibre fresco rallado

Procedimiento:
Batir en un bowl con cuchara de madera las cuatro yemas, el azúcar y la manteca hasta formar una crema. Añadir la leche, el cognac y la harina tamizada en forma de fina lluvia. Mezclar bien y añadir el jengibre rallado. Añadir las dos tazas de higos tiernizados (si son pasas de higo se las debe poner en remojo la noche antes en un tazón con agua fría al que se le agregó un toque de cognac para que se hidraten).
Cortar los higos en cuartos, pasarlos por harina y agregarlos a la preparación, mezclando suavemente sin batir. Enmantecar y enharinar un molde grande de budín inglés y colocar la preparación procurando que quede pareja. Cocinar en horno suave durante una hora y tres cuartos a dos horas. Desmoldar cuando esté frío.


Receta : “Dumplings” Muchas gracias Lucía Inés Odello Torres de Ginzio - Puesto 3 -
Mi nieto mayor de 10 años me prohibió que les envíe la receta porque él es fanático de los “Dumplings” y quiere que sea un secreto familiar.

Mi bisabuela irlandesa cuando no tenía papas en irlanda la sustituía con estos “dumplings”. La receta me la transmitió mi abuela Elena Inés Ford de Torres (anglo- argentina), que comenzó a trabajar como obstetra y anestesista. Siempre hizo esta comida porque tenían seis hijos y mi abuelo ayudó a construir el embalse de Río Tercero. Yo sigo con la tradición y estoy orgullosa de mis antepasados y especialmente de mi abuela indígena Bernabé Torres.

Los dumplings son una especie de ñoquis de harina que se cocinan con el mismo jugo de un estofado.


Ingredientes:
1 taza de harina leudante
2 cucharaditas de polvo de hornear
¼ cucharadita de sal
3 o 4 cucharadas de leche
1 huevo
Perejil a gusto

Procedimiento:
Mezclar una taza de harina con dos cucharaditas de polvo de hornear ¼ de cucharadita de sal. Una vez mezclados estos ingredientes secos, agregar tres o cuatro cucharadas de leche y un huevo para formar una masa blanda. Cortar la masa en ocho pedazos y soltar sobre un estofado hirviente un cuarto de hora antes del fin de la cocción.
Como opción, preparar una pata de cordero cocinándola en salsa abundante. Una vez cocida coloco los dumplings, retirar la carne, tapar la olla e ir dándolos vuelta de a ratos.


¡¡ESPERAMOS QUE LAS PRUEBEN USTEDES TAMBIÉN!!




No hay comentarios: